lunes, 23 de enero de 2012

Basta de pendejadas

Manuel García Estrada


No encuentro otra palabra para poder describir lo que siento ante la situación que vivimos hoy en día en donde los que se creen poderosos, de influencia, “nice” o “bien” producen en todos lados. Hoy su cerebro se ha dañado y creen que sus tonterías deben ser aplaudidas.

Pendejo en la Argentina es un niño, una niña; el diccionario dice que es el vello púbico pero los mexicanos decimos “pendejo” al que es muy, pero muy tonto, orgulloso, cerrado y mitómano. Pendejo es aquel que comete pendejadas y que las más de las veces cree que son lo correcto para proponer un proyecto, una solución a un problema -por eso lo de mitomanía-, el pendejo se hace una historia errónea que propone como razonable y se monta en su macho de que eso es lo adecuado. No es pendejo el que es ignorante y se equivoca porque al aprender y corregir su error enmendaría su falta, pendejo es el que se enterca en sus estupideces.

Ser pendejo no significa ser un fatuo orgulloso y es la gente más propensa a la corrupción, pueden serlo muchos políticos que llegan a sus cargos justamente por su ignorancia y necedad que les convierte en perfectos peleles aunque estos vistan de Prada. Los pendejos son manipulables siempre, por tanto son convenientes para el poderoso.

En las últimas semanas se ha detectado un incremento en el índice de pendejadas en México, desde la  ruin y segregadora campaña de “México Vivo” en la que señalan que un niño que nace con VIH es un nene “marcado” y en la que vuelven a mezclar al sida con la homosexualidad, al gay le llaman “maricón” y a las mujeres libres sexualmente “zorras”, mientras mezclan todo ello con imágenes de un niño y una niña de unos 8 años que terminó en protestas y el cambio de todos los anuncios en todos lados pasando por los inquisidores del payaso “Platanito” que casi lo linchan por un pésimo chiste en lugar de lanzar la furia contra los jueces que exoneraron a los parientes de Margarita Zavala de la tragedia de la Guardería ABC. Desde la campaña manipulada para recolectar alimentos para la sierra Tarahumara en la que los “activistas” llevaron toneladas de limosnas a una etnia que en realidad necesita justicia, terminando el espectáculo en opening de una caravana de la CNC del PRI en época pre-electoral en la meritita capital nacional con rarámuris incluidos hasta las que comete el equipo de Enrique Peña Nieto y que comenzaron en Guadalajara con su propio protagonismo pasando por el pésimo manejo del tuit de su hija en donde discrimina a la población y la humilla, pasando por el no saber el precio de las tortillas, el salario mínimo, decir que son las “señoras de la casa” las que deben saberlo, decir en acto público que el PRI busca la desigualdad social o decirle a una senadora que no puede ser candidata por ser mujer y llegando –porque parece que esto apenas continuará- a atacar al sitio web “el menos peor” en donde metieron 9,600 votos a favor de Peña Nieto tratando de hacer un fraude a la opinión pública que terminó con una declaración del director del sitio en el que exhibe no sólo el hecho sino el origen de todos estos “votos” haciendo circular una tabla en donde se puede leer que de las 22 a las 22:34 horas del 17 de enero se bombardeó a la página desde una sola IP. Ya para qué les digo que vía celular se dirigen las escaramuzas tuiteras para que los jueves Peña sea Trending Topic y que también ya han sido descubiertas y exhibidas.

Merecemos un mundo real, verdadero, en donde libremente elijamos lo que queremos, en donde la comunicación y la política sean responsables y busquen lo mejor para la sociedad, por eso, ya basta de pendejadas.

@ManuelGarciaES en Twitter

2 comentarios:

  1. Así de simple, mas no sencillo... "merecemos un mundo real, verdadero".
    Y coincido contigo, basta de pendejadas!!! ¬¬

    @martuchita :)

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  2. Excelentes ideas, también nosotros pensamos en que ya debemos de salir de toda esta basura en la que estamos.
    Saludos de parte de todo el equipo.

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