Manuel García Estrada
I
Salió de la casa con el termo de mate en mano, parecía que huía del lugar que más quería porque ni siquiera cerró la pequeña ventana del baño que está en el segundo piso y que cuando llueve permite remojar nuevamente los azulejos. No todos los días debía llegar tan temprano al trabajo, esta mañana sí.
Viajando en el autobús de caja doble permanecía observando el recorrido que le llevaba desde el parque hundido hasta la glorieta más gay de todo el mundo en donde la insurgencia actual era sólo de una banda de emos y punketos que se instalaban ahí para drogarse, platicar y tratar de cuestionar a los turistas con su imagen. Veía los árboles y las tiendas mientras el cerebro le hacía viajar entre colores por la música que traía en sus oídos en la que se escuchaban beats trepidantes. Descendió del bús y comenzó a caminar hacia la torre de oficinas en donde tenía la entrevista en el piso cuarenta llevando el ordenador portatil en un bolso de piel y algodón que le regaló su primo, el que casi nunca ve pero que adora, cuando estaba ya a una cuadra del edificio vio el reloj que para su asombro le mostraba que faltaban aún cuarenta minutos para la cita y sin mostrar molestia alguna, aparentando que todo lo tenía calculado se sentó en la extraña banca que dejaron en la avenida los del departamento de cultura que tras la exitosa exposición de muebles urbanos dejaron de fijo en la acera, sacó del bolso el mate, se sirvió la yerba y el agua, le gusta amargo porque se siente más él.
Estaba tomando el mate cuando frente a él pasó un hombre de unos treinta y cinco años, con barba entrecana, sienes platinadas, ojos azules, cuerpo amplio y vestido con ropa deportiva, los pantalones cortos eran más pequeños que lo habitual y dejaban ver tatuajes. Se quedó inmóvil y dio un gran sorbo a la bebida e hizo ruido, acto que provocó que el sujeto le volteara a ver y le sonriera, se dio cuenta que le había gustado y siguió de largo con sonrisa amable, como hacen los más bellos cuando se dan cuenta de ser admirados y cuando sonrojado quiso servir más agua sonó el teléfono móvil. ¿Andrea? Si, ya llegué, estoy enfrente ¿tú dónde andas brujis? Ok, perfecto, te veo en el café de la entrada y guardó todo para ver a su amiga que ya estaba arribando a la reunión, habían pasado diez minutos desde que dio el gran sorbo, sin darse cuenta sólo había quedado en su cabeza la imagen del deportista que vio.
Entró a la tienda y para su sorpresa Andrea ya estaba con café en mano óyeme bruja ¿cómo es que llegaste tan pronto? Le dio un beso y después de ponerse acuerdo sobre la entrevista a realizar bebió de prisa un expresso doble y subieron a trabajar.
Señorita, buenos días, somos de la revista de arte Vanguardia, venimos a ver al señor de la 'O y tenemos una entrevista acordada con él, la secretaria asintió saludando y les pidió que tomaran asiento. Al cabo de un par de minutos la empleada se levantó de la silla y les pidió que la siguieran, Andrea leyó el gafete de la muchacha que decía “Doris Alimanidina” y volteó buscando a su compañero para que después ríeran del chistoso apellido pero él estaba viendo a través de los ventanales a la pequeña ciudad desde lo alto. Entraron a un salón amplio con una enorme mesa para veinte personas, estaba en la esquina del edificio así que dos paredes en realidad eran cristales desde donde parecía que se volaba sobre el bosque que está enfrente, Doris les preguntó si querían alguna bebida y ambos pidieron un expresso, ya solos Andrea se enteró del acontecimiento en la avenida cuando el mate sonó y le reclamó a su amigo el que no hubiera hecho algo por hablar con el hombre.
En ese momento se escuchó una voz masculina pero juvenil que se acercaba diciendo que él llevaría los cafés a los invitados y que a él le prepararan un espresso doble sin azúcar, que le llevaran un bisquet y se abrió la puerta. El par de ojos azules se hicieron enormes coronando la sonrisa y notándose más intensos por el rojo que cubrió el rostro del hombre que es director de la oficina del consejo Reacción, una organización de industria cultural independiente y se presentó, Soy Paul de la 'O, buenos días, estos son sus cafés ¿quieren algo de comer? Porque yo desayunaré mientras platicamos ¿está bien? Los dos aceptaron las tazas del brebaje ligeramente nerviosos, dijeron que no querían nada más y extendieron la mano. Buen día señor de la 'O, soy Andrea Joradán, editora de Vanguardia y él es Patricio Azelnob, el director de la revista, gracias por recibirnos y mucho gusto de verdad.
Mucho gusto Andrea y a Patricio ya lo conocí hace unos minutos en la avenida porque ¿tu eras el que tomabas mate, no? Andrea de golpe tragó el café y se sentó con una enorme sonrisa mientras Patricio se ponía de mil colores respondiendo que sí, que era él. Muy bien dijo Paul quitándose el saco dejando solo la playera blanca y ligeramente suelta que dejaba ver un tatuaje en el pectoral izquierdo y que permitía ver las pulseras de tela con la leyenda “gobierno de izquierda, pueblo libre” y “Azota a las sotanas” ¿para qué les puedo ser útil? Andrea explicó que la entrevista deseaba mostrar no sólo el trabajo de la organización que dirige Paul sino la filosofía que mueve a todos los que ahí colaboran para promover ideas y sentimientos.
Reacción es un conglomerado de idealistas y hacedores, somos muchos pero muy pocos en relación a lo que hay que hacer por este país, pero también somos tercos, necios, estamos convencidos de que podemos modificar las estructuras culturales detonando la economía para sacar a los más pobres de la miseria. Desafiamos a los gobiernos y a las empresas, a las religiones y a los caciques, lo hacemos con elegancia pero con determinación, las más de las veces lo que encontramos ante las propuestas es una buena recepción porque lo que trabajamos jamás se confronta con lo bajo, con la grilla y con eso hemos logrado lo que hemos hecho. Eso sí, antes era todo muy “light” pero desde que estoy al frente he subido unas rayitas a la propuesta ideológica ya que si no proponemos una idea como meta jamás llegaremos a ver un cambio verdadero. Andrea y Patricio escuchaban y abrían los ojos ante la mirada y voz de Paul que era clara y de dicción perfecta, sacaban notas a mano además de haber colocado las grabadoras ¿por qué vinieron ustedes a entrevistarme, no debía venir un reportero o algún fotógrafo? Y despertando del trance que provocaba escuchar al entrevistado Andrea dijo que para ellos era muy importante conocerlo ya que sabían de su trabajo e influencia en muchas ciudades y comunidades del país y que sí, que el fotógrafo estaba citado pero que no tardaría en llegar ya que estaba en una diligencia previa ah bueno, no es que me gusten las fotos pero es que es lo habitual para una entrevista ¿no es cierto? Pero bueno, estoy comenzando a hablar mucho y ni siquiera estamos disfrutando el café que es de Córdoba y que saben que es muy bueno, así que hagamos ésto más amigable porque además creo que cuando hablo mis ojos se ponen como si estuviera poseído jeje, estallaron risitas en boca de los periodistas cuando Doris entró con el café de Paul y su bisquet partido por la mitad, en el plato venía un frasco de miel que decía “Miel 100% pura de Casa de Doña Anita, Pueblo de San Lorenzo de los Negros, México” y cuando untaba al pan el líquido dorado Paul los volteó a ver y reparó Doña Anita tiene ochenta años y todas las mañanas se levanta a recoger la miel más fresca que me hace favor de mandar, la visito cada mes en su rancho, siempre llevo algo para desayunar o comer pero jamás me da de lo que cargo, siempre me hace tortillas a mano, frijoles con epazote, pollo con tomate y berenjena asados con una salsa picosa que no tiene madre, vaya, pero y ustedes ¿qué? ¿Nunca hablan? Esto ha sido todo un monólogo Doris se metió a la conversación sin pena cuando oyó lo dicho ¡Ay Paul! Ya te dije que intimidas a la gente, eres uno en la oficina y otro en las comunidades, en la ciudad siempre pones a la gente nerviosa y volteando a ver a Patricio y Andrea les advirtió si ustedes no hablan este hombrecito se la puede pasar hablando por horas y después tengo que carrerearlo para que continúe con la agenda así que si no se quitan el miedo cuando regrese será para llevármelo que hoy debe estar en el Congreso peleando con una bola de diputados que se hacen patos todo el tiempo, así que mejor hablen ¿quieren más café? ¿galletas? Y se rió junto con Paul.
Patricio con una enorme sonrisa finalmente abrió la boca No Doris, no más café que ya he tomado varios, y bueno, también mate viendo traviesamente a Paul y Andrea ¿tampoco quieres nada verdad? Permitiendo salir a la secretaria continuó Paul ¿cuáles ideas impulsas en tu trabajo? Se abrió la puerta de nuevo, era otra vez Doris para anunciar la llegada del fotógrafo que era un panzón que medía como un metro y sesenta centímetros con pelo chino y largo hasta los hombros que vestía una camiseta con la foto del Ché con unos jeans de dobladillo exterior como de veinte centímetros que dejaban ver unas botas “caterpillar”, traía colgada una cámara excesivamente cara que recién sacó de un bolso lleno de parches con nombres de ciudades de Europa usando sus manos que tenían un anillo en cada dedo, en la cabeza portaba una gorra de golf invertida y el hombrecito moreno usaba lentes de pasta blanca, Paul lo veía con extrañeza hasta que no aguantó y dijo Y tú ¿cómo te llamas y de que manga saliste? Andrea intervino presentándolos él es Gaudencio Zepahua, nuestro fotógrafo estrella, viene de acabar de estudiar en París, ganó una beca y ahora hasta exposiciones está montando Gaudencio volteó a verla con cara de enojado y dijo gracias Andrea, soy Gau don Paul, usted no se acuerda de mí pero le saqué como cien fotos hace tres años en la reunión de galeristas en resistencia en el zócalo, en un mitin del presidente legítimo de México, se dejó usted retratar super a gusto, de hecho sus fotos son mis favoritas, hasta metí una a un concurso en Reims y gané el primer lugar y viera como me preguntaron sobre la identidad del modelo y de verdad le digo eh, debiera dedicarse a la artisteada o a la modelada porque pasu mecha, cómo me preguntaron por usted, hombres y mujeres, casi casi me pongo a vender retratos pero pues ya con ganar el premio, que fue esta camara, me fue suficiente Paul se echó hacia atrás en el sillón y pidió a Doris otro expresso doble y le indicó que invitara al fotógrafo algo a lo que el Gau respondió que quería un expresso “igual al del señor” Eres de los míos mi Gau, ya me acordé de tí, muchas gracias por aquellas fotos, la neta me gustan mucho, a ver cuándo me sacas más porque ando con un proyecto de un libro y se basa en mucho retrato, que bien que ganaste en Reims y mira nomás que camarota, está súper chida el cambio del léxico de Paul hizo que Andrea y Patricio se voltearan a ver porque el fotógrafo había creado otra atmósfera con el entrevistado, una que no se imaginaban que tenía el aguerrido retórico, gracias a Gau Paul se humanizó y era la faceta que ellos querían mostrar en la revista, así que decidieron introducirse lentamente al diálogo entre de la 'O y Zepahua Oye Gau, Zepahua es la zona de Zongolica ¿no? La conversación prosiguió entre palabras que hablaban de la muerte de la indígena Ernestina Ascencio en manos del ejército mexicano y de cómo el gobernador y el presidente se coludieron para ocultar el hecho violando derechos, otra vez, de los indios. Las grabadoras no se apagaron jamás y con el cuestionamiento ligero para profundizar en los temas Andrea y Patricio continuaron como niños escuchando todo lo que se dijo hasta que cuando se habló de democracia Patricio interrumpió ¿Hay democracia Paul, para ello trabajas? De la 'O bebió lo último del café Si Pato, para eso trabajo porque ¿de qué sirve la educación o las artes si vives oprimido? ¿Cómo crearemos nuevas cosas si estamos vetados, censurados, amarrados por ideas, por gobierno o por religión? La democracia es el poder del pueblo y para el pueblo pero éste para llegar a ella debe acabar con los dogmas, con los parásitos que viven de la explotación de las masas para desde el poder perpetuarse en privilegios y que con ese poder hacen negocios traficando influencias y desviando rescursos públicos para favorecer a sus negocios como lo hemos visto de manera constante, para colmo ¿de qué sirven las ideas si debes someterlas al gusto de otros que son ignorantes y que sólo saben abrir la boca para engañar a la gente? Nuestra nación vive sometida por las ideas retrógradas y primitivas, egoístas y sucias de una bola de cabrones que manipulan los medios de comunicación para echarse flores y favorecerse como los bondadosos y justos cuando en realidad ellos son capaces de matar a gente como Ernestina y cerrar filas para que no haya justicia ¿De qué sirve el conocimiento y la vida si no se es libre? Para nada sirven, por ello si trabajamos a favor de las artes, las ciencias, la educación y el derecho a la economía podremos despertar al pueblo para que sea fuerte y seguro de sí mismo y con ello vote y se gobierne como de verdad merece, no con patanes dicharacheros que se amafian con gente corriente que sólo desea dinero. Patricio abrió los ojos y dijo no mames, me encantas cabrón Andrea casi atragantándose se quedó anonadada mientras Gau y Paul fruncieron el ceño y comenzaron a reír Lo ves mi Paul, te digo que tu eres un tipo muy vendible, me cae, ya hasta este Pato le brotó lo mismo Andrea intervino inmediatamente Gaudencio, un poco de respeto caramba pero de la 'O sonriendo defendió al fotógrafo Andrea, no está diciendo nada malo, además Patricio agradezco el comentario, me pareció honesto y bueno, yo creo que será mejor dejar aquí la entrevista porque no tarda en entrar Doris para enviarme al Congreso como cada jueves diciendo ello la secretaria hizo eso, entró para decir que ya era hora de ir tras los diputados. Todos se levantaron y Patricio muy apenado les pidió a sus compañeros que le dejaran un momento a solas con Paul y cuando salieron éste ligeramente cabizbajo le dijo a de la 'O que le disculpara No te apures Pato, no me pareció ofensivo, al contrario, lo agradezco; más bien quiero saber porqué en la calle no me hablaste, seguramente me hubiera detenido para charlar, eres muy tímido y mira, te traicionó el sub conciente, pero creo además que no tuvieron oportunidad de hacer la entrevista como querían y si deseas puedo ir yo a la revista para concluirla, tu me avisas ¿ok? Y dando un apretón de manos Patricio le dijo que sí y que le llamaría esa misma semana, Doris otra vez interrumpió Paulomón, llégale al Congreso porque ya está abajo tu cuchifláis para llevarte y le puso en las manos la computadora portatil, el teléfono móvil, un café en un termo pequeño, el saco y comenzó a leerle lo que tenía que hacer mientras se cerraba el elevador con los periodistas.
En el elevador había silencio, hasta que Gau dijo Mi Pato, te rayaste con el Paul, ese güey es a toda madre y mira que está chido Andrea completó chido, guapo e inteligente, es un bombón inalcanzable y el fotógrafo respondió para tí si mi Andrew porque el Paul es más patito que éste, yo lo vi en aquella reunión de la mano con un cabrón argentino muy grandote, pero estando en París vi a ese mismo sudamericano muy contento con un chamaco rubio, se me hace que hasta anda de soltero el pinche Paul, es a toda madre me cae, poca madre el puto y habiendo escuchado todo eso Patricio apretó los labios y sonrío, Andrea le pellizcó un cachete y le dijo Ay cabrón, se me hace que ahora si se te hace, apenas ese muñeco está como lo que te gusta cabroncito maldito, siempre te toca que los más guapos sean gay.
II
Patricio caminaba por la mañana a modo de paseo en el parque cercano a su casa cuando viendo jugar a unos niños a las escondidillas pensó que debería de llamar a Paul para concertar la cita para concluir la entrevista y sobre todo para tener la oportunidad de verlo de nuevo y se comenzó a conflictuar porque era sábado y consideraba impropio marcarle al galán responsable de dar el gran sorbo al mate. Se mantuvo pensativo hasta que chocó con un voceador que ofrecía en su puesto a Vanguardia pero además ofrecía una revista que no conocía, la pidió y se fue al café de la esquina para leerla.
La revista desconocida se llama Blackbird y era de ciencia, literatura, artes plásticas, cine y de opiniones políticas determinadas, fuertes, recias. Patricio se quedó anonadado al ver la calidad de las ideas y lo sencillo de la publicación y buscó el directorio que para su sorpresa era encabezado por de la 'O. Era el boletín mensual de la organización que dirige Paul y fue en ese instante cuando decidió llamar al hombre aquel que se le develó más interesante.
¿Bueno, Paul? Hola, buen día, habla Patricio de Vanguardia ¿cómo te va? Sí, hablo para lo de la entrevista que hace falta terminar, ok, ok, entiendo, pero si te vas mañana por semana y media eso nos haría no tener completo el trabajo para la publicación ¿hoy? Si puedo ¿a las 7 de la noche en el bar Las Ranas? Sí, de hecho he estado ahí varias veces ¿tu vives por ahí? ¿Pero será un buen lugar para la entrevista? No, no, sí, estoy de acuerdo, ok, entiendo. Y quedó perplejo. Paul le había citado sin reparos a tomar algo para platicar y ampliar el trabajo periodístico. Le quedó claro que no le diría a Andrea porque querría ir y sólo le llamaría a Gaudencio para que tomara algunas placas y que no se notara el ánimo de querer estar con Paul a lo descarado.
Todo el día estuvo nervioso y después de citar a Gaudencio al lugar recibió la llamada de Andrea preguntándole que qué haría esa noche a lo que respondió que estaría con un amigo que lo visitaba de otra ciudad y que estarían platicando y yendo a tomar algo y que le avisarían si salían de antro, enseguida se metió a bañar y se vistió con la camisa que más le gustaba, el pantalón de mejor hechura, los zapatos bien boleados y tomó su teléfono móvil que es también grabadora; salió de casa tranquilo y paseando, respiraba profundo, iba temprano porque quería estar en Las ranas antes para controlar el espacio y el nerviosismo no lo traicionara pero para su sorpresa cuando iba arribando al lugar vio que Paul ya estaba sentado en un banco pegado a la barra, se encontraba viendo un televisor que estaba a su izquierda y tenía en la mano un vaso de cristal con líquido transparente ¿Tomará agua nada más? Pensó.
¡Hey! Hola, pensé que estaba llegando antes que tú y extendió la mano a Paul que sonrió con franqueza y contestó Hola Pato, para que veas te gané y es que la neta estaba re aburrido en casa, no quería leer, no quería chatear, no quería estar encerrado y ando por aquí desde hace un rato, es que bueno, me queda cerca de casa y es como mi pub personal y volteando al ver al barman, que era un tipo musculado, guapo, de camiseta desmangada y sonrisa coqueta dijo ¿No es cierto mi Rober? A lo que el hombre respondió asintiendo con un guiño y comentó pub personal y de tus historias galán, que aquí el mal ejemplo del lugar lo pones tú, siempre diré que naciste para el pecado muñeco Patricio se quedó observante, sonriente y pensativo ¿quién es en realidad Paul de la 'O que es carismático, se relaciona muy amigable con todo mundo pero tiene un dejo de soledad que más atractivo lo vuelve? Y expresó Gau no debe tardar, tomará un par de fotos más Paul se le quedó mirando un tanto extrañado ¿fotos? ¿Aquí? Mejor en la banca que está en la glorieta de la palmera ¿no? A lo que Patricio dijo que si y le preguntó ¿Qué tomas agua? El barman enseguida se metió a la conversación No, el muñeco toma vodka en las rocas pero se chupa el hielo antes de terminar el vodka, me llamo Axel ¿qué quieres que te dé? Patricio entendió que el barman estaría de metiche y que acabaría siendo el Gaudencio del día en que comenzaron haciendo la entrevista, no se lo quitaría de encima y el propio Paul tolera esas intromisiones y soltó con tono de indiferencia A mi dame una Quilmes y enseguida un vaso de grueso cristal y una botella de cerveza aparecieron con un plato pequeño y hondo lleno de cacahuates.
Y bien Pato ¿qué más me quieres preguntar? ¿Para que te soy bueno? Patricio comenzó a darse cuenta que cada vez que Paul hablaba usaba el doble sentido, el albur. Se sonreía cada vez que hablaba pero no decía nada, como si fueran chistes personales que unos cuantos entendían, de hecho sorpresivamente entendió algo, se relaciona muy bien con la gente que es maliciosa y que saben que los alburea, por eso se lleva tan bien con la secretaria Doris, con Gau, con Axel ¡el tipo es la onda! Se dijo y voltéandolo a ver comenzó a reír y dijo ¡Eres un alburero! ¡Ya te caché! ¡Siempre estás albureando a la gente! Y Axel nuevamente de metiche y soltando fuertes carcajadas dijo ¿Te llamas Patricio, no galán? A tí hasta con el nombre te va a estar castrando este cabrón echando carcajadas más fuertes que interrumpió Gaudencio con un a ver chamacón, échame una victoria para que te rías más agustito papá. Buenas tardes Patricio, ¿qué pachó mi Paulillo? ¿De qué tanta risa cabrón? El que contestó fue el barman Ten tu chela güey ¿Tú quién eres? Y nos estamos ríendo de que aquí a tu cuate el Patito se lo han estado albureando y no se da cuenta Patricio intervino de inmediato Es que yo soy un tipo que no entiende mucho del doble sentido Gaudencio replicó de inmediato Ya nos habíamos dado cuenta y todos comenzaron a reír.
Después de hacer algunas preguntas y tomar algunas fotos Gaudencio se fue y Patricio pidió la cuenta ¿Ya te vas? Le dijo Paul ¿Por qué? ¿Qué vas hacer? Vamos a cenar o qué ¿no te tomas un vodka conmigo papá? Patricio pensó muchas cosas en ese momento, se dio cuenta de que tenía una oportunidad de estar con un hombre interesante que le gusta mucho pero que a medida que lo iba conociendo veía que el tipo era todo un cabrón, que era un ligador de los más rudos, un rompecorazones de las grandes ligas y se apanicó. Bueno, es que quedé de llamarle a Andrea y pues, no sé Axel en ese momento le colocó un vaso en la barra azotándolo ligeramente con dos hielos y comenzó a llenarlo con vodka y se lo acercó con un ligeró empujón con los dedos de su mano extendida Vodka para el Pato, porque si no lo es se ve que sabe en donde está la laguna y le guiñó Salud le dijo Paul y los vasos chocaron.
Te doy miedo Pato ¿Crees que te quiero hacer algo? Créeme que si quisiera hacerte algo lo haría sólo con tu aprobación y te digo en serio que soy un tipo más chido que cabrón y me haz hecho una entrevista que me ha gustado mucho y sin saber cómo Patricio le replicó si me das miedo pero antes que hablar de eso cuéntame algo que no te pregunté hace rato ¿dime por qué no comentaste el día que estuvimos en tu oficina que eres el director de la revista Blackbird? Y le guiñó Mira Pato, Blackbird es una revista que verás en muchos lugares pero que es una revista con mucho dolor, es una refugio de hombres y mujeres libres, ha sido vetada, censurada, alguna vez fue liquidada por derechistas y conservadores y que comenzó a circular otra vez con el esfuerzo de muchos que hemos sido marginados de las editoriales, de los medios convencionales, de las grandes ciudades. Blackbird es la revista que busca despertar conciencias y mostrar la belleza de manera inteligente pero tiene una esencia que tiene mucho que ver con las emociones que te provoca una canción de los Beatles que es jústamente “blackbird” y Paul se recargó serenamente en la barra. Axel intervino otra vez Pato, ya me apachurraste a mi muñeco, que malo eres y sirvió otro par de vodkas. No fue mi intención hacerte sentir mal, pero no entendería porqué te pones down al hablar de este tema. Un plato pequeño de patatas fritas fue colocado en medio de los hombres con una botella de salsa catsup, una de salsa tabasco, la seña de silencio en la boca de Axel y un guiño más. No es que me ponga down papá, lo que ocurre es que es el proyecto y actividad que más quiero en todo lo que hago, es lo que tengo en las venas y aunque me emociona mucho para bien hoy es una tarde en la que extraño a mis amigos, a los que casi no veo, a los que se murieron, a los que han estado conmigo y que se reunieron todos en torno a la Blackbird. Es todo, llenó las patatas con las salsas, comió un par y dijo ¡salud!
Las Ranas es un bar que debe cerrar a las 12 de la noche, así está estipulado y por ello Axel se acercó a Paul para decirle que ya era hora de salir ¿Qué vas hacer? Le dijo el barman ¿Quiéres que vayamos algún lado? Paul le pidió la cuenta y le dijo que no pero volteando a ver a Patricio le preguntó si él quería ir a otro bar y medio mareado Pato asintió. Bueno muñeco, creo que hoy cenarás Pato comentó el barman denotando un poco de celo. ¿Es tu novio o tu algo? Le preguntó Patricio a Paul No Pato, Axel y yo somos solamente amigos pero a veces duerme en casa Y salieron del bar caminando hacia otro lugar que se veía a un par de cuadras, lo anunciaba un grupo de hombres que esperaban entrar y justo bajo un árbol que imposibilitaba el paso de la luz del arbotante Paul tomó de la cintura a Patricio con fuerza, lo acercó a él y tirándole del pelo de la nuca para que echara hacia atrás la cabeza le lamió el cuello, subió la lengua a la oreja, se la mordió, pasó entonces a chupar sus labios, bajó las manos y le apretó las nalgas dándole ya un beso profundo y tomándolo de la quijada lo echó atrás mirándolo con malicia y calentura, Patricio abrió los ojos y le dijo Eres un cabrón Paul de la 'O, eres un muñeco muy cabrón, hazme lo que quieras, ya.
Pasadas dos semanas de la entrevista para Vanguardia la revista llegó a manos de Paul y le gustó. La colocó en un pancle de publicaciones, fotografías y cartas que tenían la leyenda “por escanear” y llamó a Doris. Ese día trabajaron todo el tiempo en la oficina muy concentrados hasta que la secretaria dijo ¿Quiéres que llame a la revista para que les des las gracias? Paul sonrió y le dijo que no hacía falta, que ya les habían mandado un correo electrónico y que Gaudencio le tomaría unas fotos el fin de semana que se acercaba en la playa. Hay que seguir en el viaje le dijo a la secretaria que le comenzaba a preparar un espresso doble.